El cuero regenerado, como su palabra lo indica es un material que ha sido sometido a cambios y procedimientos para alcanzar un resultado, lo más parecido al cuero genuino, pero sin duda alguna, mucho más barato y útil para la confección y fabricación de todo tipo de piezas y artículos para el hogar.
Este tipo de cuero, es muy usado para fabricar cubiertas de sofás o muebles, libros y biblias. Si necesitas decidir por cuero laminado, antes que el genuino u otro tipo de material, definitivamente la durabilidad puede convencerte de escoger el cuero regenerado como una de las mejores opciones.
El cuero regenerado definitivamente no es cuero genuino o real.
Eso lo debemos tener claro desde el inicio. Es creado por la conjunción de otro tipo de materiales o más bien sustancias, como pegamento y poliuretano. Y la idea es que al menos desde el punto de vista estético, pueda ser confundido con cuero genuino o verdadero, pero sin llegar a serlo.
Su parte visible o externa es de poliuretano, con ciertos relieves que lo llegan a semejar bastante al cuero real, con una capa interna o intermedia de tela. La parte posterior es el área donde si lleva fibras de cuero real, en un porcentaje que puede variar de acuerdo al fabricante. Para procesar y someter a procedimientos de manufacturado del cuero regenerado se aplican procedimientos similares a los que son sometidas las pulpas de papel para su fabricación.
Uno de los aspectos determinantes que marcan la diferencia en cuanto al cuero regenerado es que el mismo si se desgasta o se raya su apariencia es muy desagradable. El rasgado logra dañar la superficie externa de poliuretano, con lo cual se produce un cambio en el color de manera radial, puesto que la tela que está en la parte de abajo, o lo que se conoce como la entretela, puede ser de cualquier color. El cuero genuino no presenta este problema y más bien su estética es agradable con un aspecto como envejecido, cuando este desgaste o rayadura suceden en su superficie.
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Para limpiar el cuero regenerado
Debes hacer uso de un paño húmedo. Sobre la superficie externa no debes usar de manera directa agua, jabones o detergentes con alto contenido abrasivo o que contengan alcohol. Hacerlo convertirá la pieza en una superficie agrietada e irrecuperable. A diferencia que con el cuero genuino, el cuero regenerado no necesita ser hidratado o acondicionado con productos especiales para ello, pues que la piel genuina solo está en la parte posterior de la pieza.
También, debes tomar en cuenta que el cuero regenerado no debe ser sometido durante largos períodos de tiempo a la luz solar o fuentes de calor directas, pues hacerlo puede causar daños como cambio de color y rasgado de la superficie.
En resumen, lo que se conoce como cuero regenerado, es más tela que piel, pero como cuentan con cierta porosidad, son más resistentes y fáciles de limpiar que superficies textiles comunes y corrientes. Una ventaja adicional, es que su textura es suave y se parece mucho en este aspecto al cuero verdadero, así como el precio, también suma un punto a su favor.